Al fin tengo las agallas de describirme por completo, o quizá solo hasta ahora empiezo a conocerme. Es como dormir con un extraño quien hoy al despertar tuvo la amabilidad de presentarse con un beso en la frente para tranquilizarme; y porque ahora reconozco que no tengo mucho que decir por las mañanas, porque mi creatividad nocturna gastó todas las palabras, ofreciéndome apenas un "buenos dias"; y las uso junto con una sonrisa a medias, porque todavia estoy aprendiendo la espontaneidad de mis minutos.
Estoy convencida que un buen amanecer no necesariamente se mantiene hasta llegar a cerrar mis ojos, pero me da las fuerzas que requiere disfrutarme como propia compañia.
No significa que sea del todo emocional, confieso que uno de los tantos matices que ahora entiendo, tiene su lado consumista. no me gusta la cerveza, y la prefiero si se trata de un momento con amigos de verdad, no entiendo los dias sin café o un buen despeje espiritual, detesto los semaforos , aprovecho cada oportunidad que tengo para lavarme las manos, pero creo que no logro acostumbrarme a los secadores electrónicos, ni siquiera cuando hay frio.
Si me lastimo lo exagero, y si duele me lo guardo; ya habra tiempo de describirlo cuando rezo en tono de desahogo, porque no puedo confiar plenamente en mí. La luz del baño no se apaga, no vaya a ser que me pierda con la oscuridad y me escuche el silencio. me gusta la comida fabricada, pero escojo fumar lo natural, el corazón piensa con música, las palabras lo limitan...
qué sabe la razon de sentir?
No necesito una respuesta cada vez que te hablo, creo que me vale mas un beso, o en ocasiones con un abrazo bastaría. De ésos que alcanzan mas alla de lo que pueden tus brazos, los que no pintan limites de cortesia, sino que acercan al sentir cuando reclama padecer de locura. Nunca tienen que ser a la fuerza, pero con la fuerza indicada que se traduce a perfecto según cuenta el corazón al recobrar la expresión.
Soy ordenada al hablar, y eso me permite conocer el arte de guiar una conversacion, pero confieso que me apasiona una plática desordenada con ganas de bailar.
Tengo tambien mi rincón gris, un sentimiento desolado que un par de veces he decepcionado. El cuerpo se desgasta al extrañar, y a escondidas llamo a la soledad para curarme. He disfrazado con tus besos al miedo que siento de despertar al corazón, porque ultimamente se mantiene de mal humor.
Deberia ver las estrellas más a menudo, me pone tanto a pensar en lo que significa un yo para el universo, cuando en comparacion al espacio que ocupamos, me convierto de inmediato en insignificante, por más que trato de crecer. O puede que mi favorita de todas, me alumbre las noches que son tan necesarias, como abrir los ojos por la mañana, y que todo esto sea precisamente para mí, en definitiva no conozco el momento exacto para despertar; ya son años desde que dejé de llevar un reloj conmigo, y es por eso que tengo fama de impuntual.
Comienzo a apreciar más el cielo, adquiri cierto vicio por buscarle formas a las nubes, pero aun me cuesta ver a los demas fijamente a los ojos; tengo planeado un poco de valentía, y pretendo borrar un par de huellas que nunca desaparecieron por si solas. Escribir es mi manera mas creativa de extrañarte, y me apasiona dibujar puntos supensivos... porque esto nunca acaba.
Ésta soy yo, por ahora... porque estoy lista para ser reinventada.
eclipse lunar :)
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